No se conservan las trazas mencionadas en los contratos para la realización de la sillería del coro y los estantes de la librería; por el contrario, sí han llegado hasta nosotros los modelos ejecutados (identificados por Paz Aguiló en el Aula de Moral) a escala real para la sillería del coro. Asimismo, se conserva la traza del altar de las reliquias y la que seguramente se dibujó para planificar la nueva decoración de las salas capitulares en tiempos de Velázquez.
Cabría pensar que es imposible localizar las trazas originales de los muebles; sin embargo, la experiencia del proyecto de investigación sobre las trazas nos lleva a pensar que sí sería posible, quizá, reinterpretar algún dibujo existente de los que se conservan en el propio Monasterio. En este sentido, hay que señalar la importancia de los llamados apuntes para los altares de las reliquias (IX-M-242-FAS1/13, 14 y 15 de la Real Biblioteca del Palacio Real de Madrid). La última, atribuida a Francisco de Mora, corresponde indudablemente a la versión llevada a cabo definitivamente; las dos primeras, atribuidas a Herrera, corresponderían quizá a una versión muy primitiva de las sepulturas reales*.
Entre estos fondos de su biblioteca, merece especial atención el conjunto de obras impresas y manuscritas donado por Felipe II en 1575 a la biblioteca de El Escorial, que se conoce como la Entrega de la Librería Real. Entre los Libros de estampas y pinturas, se conservan varios libros de dibujos de arquitectura: “un libro grande encuadernado en pergamino de edificios de Roma antiguos”, “otro libro grande encuadernado en cuero negro, con diversas estampas de edificios”, “otro libro grande encuadernado en cuero colorado de estampas, las más de Alberto Durero y de otros”, “un libro de Antonio Lavaco de arquitectura”, “otro libro como de canto del mismo Cercao de edificios y cosas” y “otro libro de estampas, en que hay compartimentos y cosas de arquitectura, que tiene 273 hojas”. Y entre los Libros de estampas y pinturas de la biblioteca de don Diego Hurtado de Mendoza que pasaron en 1576 a la de El Escorial figuraban un “Libro de dibujos o antigüedades” “Estampas y dibujos diversos; tiene ciento dos hojas”, “Veinticuatro estampas de ruinas” y “Otras veintiuna estampas de ruinas y edificios”.
La reciente publicación de la primera parte del catálogo de la Biblioteca Real por el padre Benito Mediavilla (OSA) supondrá, sin duda, una ayuda importante en un trabajo que todavía está por hacer.
En lo que se refiere a planos o dibujos contemporáneos, estos eran prácticamente inexistentes, con las siguientes salvedades: los de los estantes de la biblioteca realizados por Javier Ortega Vidal (láms. XLVI, XLVII y XLVIII de su libro El Escorial: dibujo y lenguaje clásico) y los del Monumento de Semana Santa realizados por Ramón Andrada, ya mencionados.
* El mérito de idea, que me parece importante, corresponde a Luis Zolle Betegón.
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